jueves, 18 de junio de 2009

Ajedrez


Después de pensarlo, armé todo para comenzar el partido.
Blancas, negras.
Peones, torres, alfiles, caballos.

Dudé un momento al poner el rey y la reina.
Pero no podía seguir mi estrategia racional sin colocarlos.

Y comencé a jugar, conocía bien las columnas que me llevaban a tu recuerdo.
No podía ignorar las diagonales que se cruzaron, alguna vez, en el tablero de nuestros sueños...

Necesitaba hacerte jaque mate.

Comencé el juego...yo sola, jugaba contra mí misma y eso significaba jugar en contra tuya.

A contraluz veía tu sombra...


Eras el rey y el peón.

O eras el peón que yo tranformé en rey.

Me temblaban las manos cuando recordaba que el azar nos había reencontrado.
Y que la vida nos había separado...

Quería terminar esta historia.
Y eliminarte lentamente para que no te quedes en mí...

Contradicciones que te alejan y te acercan...

Y, sumado a todo esto, ... este reglamento del ajedrez que sólo permite que te capture para terminar el juego...

Laura

viernes, 12 de junio de 2009

Una mujer...

Se apagan las luces y aparece la mujer que quiero olvidar.

Recorro el silencio de esta noche que en definitiva es igual a todas.
Me sumo al oscuro misterio de esta soledad que se prolonga en el tiempo...

La seguridad de tenerme se mezcla con la inseguridad de no tenerte.

Es como un juego en el que pierdo siempre sacando la carta más baja.

Yo me invento que gano esta batalla, y acaricio la sombra que te mantuvo un tiempo conmigo.
Pero es inútil creer ganarla sin ganarla...

Vidas separadas. Un cafe amargo cuando la lluvia cae y una ilusión eterna que se pierde en el camino...

Un yo sin vos, y un sillón vacío que antes se llenaba de nosotros.
Vidas separadas...

Ese café amargo que tomo sola desde hace tiempo...

Una mujer sin llamas que se encuentra en la noche con otra mujer que es ella misma.
Sólo eso...

Laura